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La lampara encendida

¿Por qué a mí?

¿Por qué a mí?

Foto J Miguel Blanco / Heraldo

“El dolor que no habla gime en el corazón hasta que lo rompe”, versos shakespearianos como lema a la celebración del Día Internacional para la Prevención del Suicidio, por parte del Teléfono de la Esperanza de Aragón. Ni una semana antes, nos desayunábamos con la macabra noticia:” Un hombre mata a su madre y a su mujer enfermas y se quita la vida en Zaragoza”.

Un matrimonio de médicos muy querido en el barrio –médico de familia él, pediatra ella–, y las reacciones de Alfedaz (Asociación de Familiares de Enfermos de Alzhéimer de Zaragoza) y de la Confederación Española de Alzhéimer no se hicieron esperar: “Consideramos que es un caso de lo que los expertos llaman suicidio compasivo o por extensión. No violencia machista”. Luis L. M. no podría más con la dependencia de su madre, la enfermedad de la mujer, el daño cerebral de su hermano por accidente de montaña, el reciente desahucio de dos primas.

El derecho y la ley también se imponen: “Para la socióloga, quienes los cometen claramente son personas que resuelven los problemas y los conflictos de manera violenta. Y eso es delito” (Gabriela Delsignore Máspoli, profesora de Sociología de la Universidad de Zaragoza). Por último, el universo emocional. Les dejaba escrito a las hijas: “He cometido una atrocidad. Al principio será terrible y lo pasaréis muy mal, pero quería libraros de cargas”.

Hasta los místicos saben del infierno y de la noche oscura. Y hay salida: “Entonces empecé a intuir el poder mágico que tiene la belleza para una persona humillada” (Monika Zgustova, Vestidas para un baile en la nieve). Quizá se trate de otra cosa, como apuntaba el diputado Raúl Gay: “Carlos es un hombre de 40 años, con parálisis cerebral, que reside en casa de sus padres, no accesible. Los padres son mayores, fallecen y Servicios Sociales se hacen cargo. Lo llevan a una residencia y comienza a vivir –amigos, viajes, cine, pareja–. Y se siente culpable de que, debido a una infraestructura carente de recursos, hayan tenido que morir sus padres para hacerlo”. La otra cara de la moneda. ¿Hasta cuándo?

María Pilar Martínez Barca

(Heraldo de Aragón, "Tribuna", "Con DNI", vienes 14 de septiembre de 2018).

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